Te apareces con solo un Click

Cada movimiento, cada click que se da apoya la globalización,  lejos de ser un movimiento que interactúe solamente con empresas, cada partícula del universo se integra, pieza a pieza, movimiento a movimiento resurgen. La sensación de ir en contra de las leyes de la naturaleza, esa sed de vencer barreras, esa sed de estar cerca de cualquier persona y a la vez de la nada. Cada click es un viaje, viaje a través de satélites,  satélites que permiten esa sensación de rebeldía y de burla hacia la naturaleza. Esa sensación que dice que todo es posible para el humano. Esa acción que hace que el humano  sea humano al ser el único ser vivo perteneciente al reino animal capaz de adaptar su entorno a él y no de que su entorno lo adapte. Aquel humano siendo humano, rebelde ante su misma naturaleza que lo hace ser. Pero a su vez miedoso de lo que el mismo produce, miedoso de todas las consecuencias que sabe que sus propios actos lo conducen. Miedoso de dar un paso  en falso y caer. Caer en lo que el hoyo que el mismo con tanto amor y orgullo ha cavado con la única intención de mejorar y de burlar la mismas leyes de la naturaleza.